Título original: Calamity
Autor: Brandon Sanderson
Editorial: Ediciones B - Nova
Fecha publicación: enero 2017
Páginas: 416
Reseña: al fin he podido leer la conclusión de una de las trilogías de fantasía más originales que ha llegado a mi poder. Como he dicho en varias ocasiones, Sanderson es una bendición para los amantes de la fantasía y, aún más, para aquellos a los que les gusta la innovación en el género. Nunca se queda estancado en un prototipo de historia y, cada una de sus novelas, son totalmente diferentes.
Con Calamity se resuelven las dudas más importantes que nos quedan en los tomos anteriores, como son el origen de los Épicos, la existencia de Calamity en el cielo nocturno y la forma de enfrentarse a la oscuridad que hace que los Épicos acaben hundiéndose en las profundidades de su personalidad y actuando por pura maldad.
Tras haber conseguido que Megan se pasase al bando de los Exploradores, a pesar de ser lo que se conoce como una Gran Épica, al enfrentarse a sus temores, el siguiente objetivo de David (Steelslayer) no es otro que atraer de nuevo a su mentor, el Profesor, Jonathan Phaedrus. Bajo el nombre de Limelight, el Profesor se sumerge en la oscuridad y se ve consumida por la misma, intentando llevar a cabo la tarea que Regalia le había encomendado en Babilar, pasándose al bando contrario.
Sin el amparo del Profesor, David y los Exploradores se ven indefensos, teniendo que actuar sin conocer lo suficiente, improvisando sobre la marcha. Encontraran un aliado inesperado en Knighthawk, un humano con ínfulas de Épico que dota al grupo de alta tecnología (sobre todo motivadores: aparatos creados a partir de células de los Épicos que reproducen sus poderes) para que puedan cumplir la misión de reconvertir al Profesor.
Pero nada es tan sencillo como parece y las verdades no son universales...
Estamos ante un libro de aproximadamente 400 páginas con un ritmo vertiginoso. Abundan los diálogos, siendo parco en descripciones en muchas ocasiones. Esto es algo totalmente diferente a lo que se espera de Brandon Sanderson, quien destaca por la riqueza de las mismas. Lo más curioso en este libro, al igual que en sus dos precuelas son los símiles. Abundan por doquier. David, prácticamente, los emplea a todas horas y para describir cualquier situación. Son descabellados en muchas ocasiones y, aunque a veces no acabe uno por comprenderlos, siempre te sacan una sonrisa.
David y Megan son una pareja peculiar que quiere estar unida pese a todas las advertencias y desavenencias que van apareciendo a lo largo de la obra. Eso sí, no esperen romantiqueo. Son una pareja de acción, que vive por y para la lucha. Ni siquiera el cambio más importante en la vida de David (no lo digo, que si no me matan por spoilear la historia) consigue separarlos, en cambio, los une mucho más...
La acción se desarrolla principalmente en la ciudad de Ildithia, antigua Atlanta, una ciudad hecha de sal. Sí, habéis leído bien. Y no solo eso, sino que además es una ciudad que está en constante movimiento, haciéndose y deshaciéndose conforme avanza. Tiene un ciclo de 7 días y, cada vez que pasa ese tiempo, la ciudad se rehace. Esto sí que me ha parecido bastante original. Puede que lo más original en fantasía que haya leído en los últimos años.
La trama en sí me parece que baja el nivel respecto a Steelheart y Firefight, intentando resolver en pocas páginas demasiados frentes abiertos. En las últimas 30 páginas intenta quitarnos las dudas del tirón y, en mi opinión, queda un final un tanto forzado.
Eso sí, lo que deja al final son esperanzas; esperanza de que la trilogía continúe con una segunda trilogía, al igual que ha hecho con Mistborn. Además, he leído en algún lado que esa es la idea. También referir que, recientemente, la Twentieth Century Fox se ha hecho con los derechos para llevar esta historia a la gran pantalla... Solamente espero que la adaptación le haga sombra al libro, que consiga poner en duda qué es mejor: si la película o el libro.
Así que leed esta trilogía, el tiempo apremia si quieres conocer la historia de los Épicos y los Exploradores antes de que llegue a la gran pantalla. Aunque este tomo sea un tanto más flojo que los anteriores, esta historia no deja a nadie indiferente.
<<-Bueno -escribí para comprobar si la diatriba ya había concluido-, los que pueden permitirse tener uno de tus móviles son los ricos privilegiados. No debería sorprendente que sean superficiales.
-Qué va -me respondió-. Hay más de una ciudad como Chicago Nova, donde los Épicos que gobiernan son lo suficientemente listos para comprender que una población con móvil es una población a ña que pueden controlar y acribillar a propaganda. Los pobres son iguales, solo que sus mascotas están más flacas.>>
Sinopsis: Los Épicos nacieron cuando Calamity iluminó los cielos. Desde esa noche histórica, el destino de David ha estado entrelazado con el de esos malvados. Steelheart asesinó a su padre. Firefight le robó el corazón. Y ahora Regalia ha convertido a su mayor aliado en un peligroso enemigo.
David conocía el secreto del Profesor. Secreto que guardó incluso cuando el Profesor se esforzaba por controlar los efectos de sus poderes épicos. Pero no pudo superar enfrentarse a Obliterarion en Babilar. El Profesor, que fue líder de los Reckoners, se ha entregado totalmente a su destino de Épico. Se ha hundido es esas tenebrosas sombras de violencia propias de todos los Épicos. Y todo saben que de las sombras no se vuelve…
Pero todo se equivocan. Es posible redimir a los Épicos. Megan ya lo demostró. No todo está perdido. Al menos, no definitivamente. Y David está lo suficientemente loco como para enfrentarse al Gran Épico más poderoso de la historia con tal de recuperar a su amigo. O al menos, morir intentándolo.
4,5/5
¡Hola! Me encanta Brandon Sanderson, es un autor formidable porque se adapta de maravilla a cualquier estilo y situación y además es original. Quizá si que es verdad que el final resulta un poco precipitado pero al cerrar todos los frentes principales si me dio la sensación de que quedaba bien cerrado. Yo lo que había escuchado, no sé si será cierto o no es que volvería al mismo mundo con otra trilogía pero que no sería con los Reckoners (me niego a llamarlos Exploradores xD)
ResponderEliminar¡Un abrazo!
¡Hola! Lo de los frentes es verdad que los cierra, pero es casi como que falta algo de información y el final es un tanto abierto. Yo había leído lo mismo que tú, pero viendo el final no sé yo si los Reckoners (jajajajaja entiendo tu reticencia) seguirán existiendo como tales. Podría hacer como con Mistborn y considerar a los actuales como antiguos dioses. Aunque dudo que se repita así Sanderson...
Eliminar¡Un abrazo!
Antes o después saldremos de dudas porque al ritmo que escribe tendremos pronto más libros en nuestras manos =)
EliminarEso sí que es verdad... Con Sanderson no hay tiempo para aburrirse. Ahora sale la novela gráfica Arena Blanca y, aunque pertenece al Cosmere, tengo que verla antes de comprarla porque me parece cara para ser un cómic... Pero seguro que la historia será apasionante igualmente
EliminarOhhhhh que bien el llegar al final de una serie, yo es que no he leido nada de esta pero me la apunto para futuras lecturas.
ResponderEliminarTe la recomiendo fervientemente. De lo mejor que encontrarás en las librerías. Y además corta... No se puede pedir más jajajaja
EliminarEs que es demasiado bueno abrupto o no el final para mi fue "Épico". Muy buena trilogía jsjsjs
ResponderEliminarA ver, en eso te doy completamente la razón, "Épico" a raudales sin lugar a dudas jajajaja
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